LAS LECTURAS EN LA EUCARISTÍA
No es sólo leer, es transmitir el mensaje del Señor, es llegar al oyente con la palabra viva, con la palabra verdadera. Y para eso el lector se prepara antes.
El domingo 5 de diciembre será el acto de consagración de los proclamadores de la palabra.
Oración por los proclamadores
Dios todo poderoso, limpia el corazón y los labios de los que proclamaran tu Evangelio; Bendice sus esfuerzos de preparación y los momentos de meditación de tu palabra para que entiendan mejor el mensaje y lo proclamen fielmente a tu pueblo; Llena su ministerio con tu presencia, ayúdalos a prepararse cuidadosamente para que quienes los escuchen confíen plenamente en Jesucristo que anuncia el Reino de Dios y la promesa de vida eterna; Haz que crezca la fe en los corazones de los que escuchan tu Palabra y te glorifiquen siempre. Por Jesucristo nuestro Señor.
Amén
Cómo Debe Preparase Un Lector?
Todos los lectores deben tomar tiempo antes de la Misa para estudiar las escrituras y practicar su lectura en voz alta. Practicar diez minutos antes de la Misa no es una preparación debida, pero diez minutos al día durante la semana antes de la Misa si es una práctica adecuada. Los lectores también deben sacar tiempo para orar y leer las otras lecturas del día para así poder comprender el contexto de su lectura en particular. A través de este estudio y práctica, la lectura podrá transformarse en la Palabra Viva de Dios.